viernes, 20 de julio de 2007

Feliz cumpleaños!



Feliz, feliz en tu día!!!
Amiguito que Dios te Bendiga!!!
Que tengás paz y alegría!!!! Y que cumplas muchos más!!!!



Para mi amiguito imaginario, dedico este día maravilloso de buena ventura , en el día de tu cumpleaños.




Un gran abrazo Os y gracias por se tan especial.

miércoles, 18 de julio de 2007

Un jueguito

1. Cada jugador cuenta 8 cosas de sí mismo
2. Además de las 8 cosas tiene que escribir en su blog, las reglas.
3. Por último tiene que seleccionar a otras 8 personas y escribir sus nombres/blog.
4. Por supuesto, no hay que olvidar dejarles un comentario que han sido seleccionadas para este juego.

Y estas son mis 8 cosas:

1. Soy un poco obsesivo con el órden de las cosas, tengo que escuchar los volúmenes de los aparatos en ciertos números, como los múltiplos de 5 ó números impares; las camisas en mi ropero tienen que estar viendo toda para el mismo lugar, las medias con las medias y los calzoncillos con los calzoncillos.

2. Tengo ideas extrañas sobre las realidades de cada persona, en mi, el dicho: Cada cabeza es un mundo, es completamente real, pero lo podría cambiar a: Cada cabeza se encuentra en un universo alterno y diferente.

3. De pequeño jugaba solo y me imponía metas que cumplir diariamente como por ejemplo: Hoy sólamente caminaré hacia atrás; hoy no puedo sentarme; hoy no podré hablar; hoy solo puedo caminar en un pie; hoy no puedo pisar ninguna raya del piso y un montón de otras cosas similares. Hoy día tengo que hacer un esfuerzo sobre humano para no ser presa de semejantes juegos.

4. Cada tanto, un día cualquiera, quisiera ser acróbata y en lugar de caminar, avanzar dando giros con mis manos y pies, manos y pies, manos y pies.



5. Me pregunto muy a menudo cómo sería nuestro planeta si hubieran sidos las aves las que evolucionaron en lugar de los simios; o me pregunto también como sería si fueran los reptiles los evolucionados.

6. Tengo problemas serios en cuanto a mi derecha y mi izquierda, sé cuales son...pero se me dificulta mucho llamarlas por su nombre en momentos de presión.

7. Tengo un sentido del equilibrio muy particular, tengo que mirar las cosas de forma equilibrada y si a un lado hay un objeto, al lado contrario debe haber su contraparte. Mi cuerpo reclama este equilibrio hasta el punto que si me pica una mejilla, al terminar de rascarla, tengo que hacer lo mismo con la otra aunque no me haya picado.

8. Me encanta el verde, es mi color preferido, pero extrañamente la mayoría de mi ropa es azul porque me siento mejor y más tranquilo con ese color. Seguramente será porque tengo una mala memoria para los colores, cuando recuerdo un color, lo recuerdo completamente opuesto al real. Por ejemplo, cuando pienso en Clifford, el gran perro ROJO, no puedo evitar y visualizarlo como el perro AZUL.



Ahora le toca a el turno a:

lunes, 16 de julio de 2007

Café


Cuenta una leyenda que un pastor de cabras notó que sus cabras se excitaban más que de costumbre cuando ingerían las cerezas rojas de un arbusto silvestre. Llevado por la curiosidad probó él mismo las cerezas. Encantado por los efectos vigorizantes del café, se le vio bailar con sus cabras cerca de un grupo de monjes. Pronto los monjes empezaron a hervir los granos y a utilizar el líquido para permanecer despiertos durante las ceremonias que duraban toda la noche.


jueves, 12 de julio de 2007

Cuanto cuesta la vida



Y cuanto, la vida cuesta?

No hay derecho a sentirse derrotado por las angustiosas y largas horas de trabajo. El mío, me permite conocer el trabajo de otros y con suerte, ayudarlos.

Me emociona saber de las circunstancias que rodean una decisión por un modo de vida y me doy cuenta que en muchos casos, no es posible elegir; se tiene lo que hay y con lo que hay se trabaja.

No hay derecho a cambiar lo que se tiene y de debe trabajar con ello, aún así, las circunstancias no cambian la intensión y la constancia de gente que vive en condiciones muy difíciles, utilizando su empeño y su creatividad para salir adelante.

A esta casa, al corredor, viene un grupo de señoras a trabajar en un proyecto de la industria alimentaria; quienes con suerte y ayuda, mejoraran sus condiciones de vida en un futuro muy cercano. Ser parte de ese sueño me permite amanecer cada mañana con un fuerte sentimiento de agradecimiento con la vida, por darme la oportunidad de ayudar a otros.

Hace escasamente un año (lo recuerdo bien), mi vida transcurría de la rutina a la depresión, cada mañana era un martirio. Al regresar a casa, mis temores se acrecentaban con la absoluta seguridad de que no habría día siguiente y que el hoy, había llegado a su fin sin aportes de mi parte.

Me dolía despertar, me asustaba salir y me afanaba por demostrar a los demás que todo estaba bien, pero no era así. Hoy veo esos tiempos con ojos distintos y con valores diferentes.

Gracias Dios por dejar un vínculo entre vos y yo.

viernes, 6 de julio de 2007

Oh mi abuela

Oh mi abuela, la recuerdan?

Dije hoy que no iba postear nada más, pero resulta que tengo como 7 temas metidos en la cabeza y debo hacer algo al respecto, como por ejemplo que mañana es 7 del 7 del 7 y que para muchos será un día especial o más bien, lo han convertido en un día especial. Yo, me quedo con saber que será sábado y como todos los sábado, me encanta, porque me acerco más a mi modo de vida o a mi deseo de vida.

Este fin de semana será pequeño porque hay muchas actividades y muchas de ellas son actividades indivuduales, pero eso permite, dicen los entendidos, espacios en la pareja que hacen la vida más favorable através de los años, veremos. Por ahora me conformo con saber que estaremos cerca y además, te podré ver.

También me gustaría hablar de una historia que me contó mi mamá sobre la familia de su mejor amiga, pero eso será tratado en un post especial en otro día distinto, hoy solo lo comento para luego recordarlo.

Entre tantas cosas que tengo hoy por hablar, me extraña pensar que en otras ocasiones se me pasan los días e incluso las semanas sin saber que escribir y aveces ni siquiera me da para opinar en los blogs de mis amigos bloggeros, porque no solo mis palabras son torpes sino hasta mis comentarios, entonces prefiero leer. Eso me explica porque algunos días amanezco pensando en mi como un fulano que quiere escribir y otros días, solo pienso en alguien que quiere leer.

No es de extrañar mi confusión en la vida, pues es de familia...esta mañana llegué donde mi mamá a hacer mis "quehaceres" y me senté con mi abuela un ratito, hablamos y me paseó por su historia como siempre lo hace. Fué corto el tiempo así que la dejé, no sin antes prometerle que la vería en el almuerzo y asi fue, pero cuando llegué a saludarla me preguntó:

- Y usted quien es?

Y yo por supuesto le dije:

- Abuelita, soy yo F, no me le parezco a nadie?

- No, pero que lindo! Me dijo.

Crece mi amor, crece. Que bella mi abuela.

¿Cómo nace un paradigma?

"Es mas fácil desintegrar un átomo que una idea previa" Albert Einstein.

Un grupo de científicos colocó cinco monos en una jaula, en cuyo centro colocaron una escalera y, sobre ella, un montón de bananas.

Cuando un mono subía la escalera para agarrar las bananas, los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que quedaban en el suelo. Después de algún tiempo, cuando un mono iba a subir la escalera, los otros lo agarraban a palos. Pasado algún tiempo más, ningún mono subía la escalera, a pesar de la tentación de las bananas.

Entonces, los científicos sustituyeron uno de los monos. La primera cosa que hizo fue subir la escalera, siendo rápidamente bajado por los otros, quienes le pegaron. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo ya no subió más la escalera.

Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo. El primer sustituto participó con entusiasmo de la paliza al novato. Un tercero fue cambiado, y se repitió el hecho. El cuarto y, finalmente, el último de los veteranos fue sustituido.

Los científicos quedaron, entonces, con un grupo de cinco monos que, aun cuando nunca recibieron un baño de agua fría, continuaban golpeando a aquel que intentase llegar a las bananas.

Si fuese posible preguntar a algunos de ellos por qué le pegaban a quien intentase subir la escalera, con certeza la respuesta sería:
- "No se, las cosas siempre se han hecho así, aquí..."
- ¿Te suena conocido?

No pierdas la oportunidad de pasar esta historia a tus amigos, para que, de una o de otra manera, todos nos preguntemos por qué estamos golpeando....y.... por qué estamos haciendo las cosas de una manera, si a lo mejor las podemos hacer de otra MEJOR.

Eduardo A. Kovvalijszyn
Tomado del blog de Cuidadano del Mundo

Murió Sentido Común

Hoy lloramos la muerte de un querido amigo, Sentido Común, que ha estado entre nosotros durante muchos años. Nadie sabe a ciencia cierta cuántos años tenía, puesto que los datos sobre su nacimiento hace mucho que se han perdido en los vericuetos de la burocracia.

Será recordado por haber sabido cultivar lecciones tan valiosas como que "hay que trabajar para poder tener un techo propio sobre la cabeza", "que se necesita leer todos los días un poco", "saber por qué los pájaros que madrugan consiguen lombrices", y también por reconocer la validez de frases tales como "la vida no siempre es justa", y "tal vez haya sido yo el culpable".
Sentido Común vivió bajo simples y eficaces consignas ("no gastes más de lo que ganas") y estrategias parentales confiables ("los adultos, no los niños, están a cargo").

Su salud comenzó a deteriorarse rápidamente cuando se aplicaron reglas bien intencionadas pero ineficaces: informes respecto de un niño de seis años acusado de abuso sexual por haber dado un beso a una compañera de clase; adolescentes que debieron irse a otro colegio por haber denunciado a un compañero distribuidor de droga, y una maestra despedida por reprender a un alumno indisciplinado, sólo hicieron que empeorara su condición.

Sentido Común perdió terreno cuando los padres atacaron a los maestros sólo por hacer el trabajo en el que ellos fracasaron: disciplinar a sus ingobernables hijos.

Declinó aún más cuando las escuelas debieron requerir un permiso de los padres para administrar una aspirina, poner protector solar o colocar una curita a un alumno -aunque eso sí, no podían informar a los padres si una alumna estaba embarazada y quería abortar.
Sentido Común perdió el deseo de vivir cuando los Diez Mandamientos se convirtieron en material risible, algunas iglesias en negocios y los criminales empezaron a recibir mejor trato que sus víctimas.

Para Sentido Común fue un duro golpe que uno ya no pueda defenderse de un ladrón en su propia casa, pero que el ladrón pueda demandarnos por agresión; y que si un policía mata a un ladrón, incluso si éste estaba armado, sea inmediatamente investigado por exceso de defensa, cuando no acusado de gatillo fácil.

La muerte de Sentido Común fue precedida por la de sus padres, Verdad y Confianza, la de su esposa Discreción, la de su hija Responsabilidad y la de su hijo Raciocinio.
Lo sobreviven sus tres hermanastros: Conozco Mis Derechos, Otro Tiene la Culpa, y Soy Una Víctima de la Sociedad.
No hubo mucha gente en su funeral porque muy pocos se enteraron de que se había ido.
Si aún lo recuerdas, difunde este mensaje.
Caso contrario, únete a la mayoría …… no hagas nada...

miércoles, 4 de julio de 2007

La vida se escapa

La reunión había comenzado y las gentes empezaban a llenar la sala de rumorosas risas y carcajadas. Se entretejían historias y hablan en vos alta de miles de palabras que hacen volar la imaginación de los presentes y nos llenaban el alma y la memoria de momentos casi prediseñados, directamente importados de la mente de aquel que estaba a la cabecera de la mesa redonda, capaz de relatar en instantes, vidas llenas de colores y de una imaginación infinita, - una característica de nuestro grupo de amigos-.




Todos somos increíbles artistas del arte de la narración de eventos que todos hemos vivido, pero que nos encanta recordar y contar como si fuera nuevo, algo que paso apenas ayer.

Todo esto se daba en cualquier lugar, departamento, casa, café o sitio, eso sí, cerca de las candelas, de los cigarrillos y algunas cervezas que ayudan a ponerle un cierto acento a nuestra forma de ser.

En esos momentos, cuando ya la noche esta caliente y no queda mas que reír y reír, nos alejamos poco a poco y terminamos sentándonos juntos y empezamos a escapar de la realidad, a hundirnos en eso que llamas universo paralelo, solo nuestro –suena egoísta, pero así es- y nos encanta transportarnos a ese espacio casi perdido, casi estúpido, donde todos trataban de comprender y leer en nuestras caras la razón a la que jugábamos: aunque sea una señal para enlazarnos de nuevo en el ritmo de la reunión, pero es inútil, realmente en vano, ya estamos perdidos, nos fuimos volando y no queremos regresar; estamos bien, no nos extrañen, sigan disfrutando tranquilos, buenas noches, provecho y claro adelante cojé los que necesites para eso están en la mesa.

Y es que dejamos de entender, casi de respirar, es prácticamente alimentarnos de las palabras que nos decimos: es ver que me vas tejiendo telarañas de historietas que me encantaba enrollarme en las manos; me decías y me hablabas y yo otro tanto que después era otra historia y otra más y otra, hasta darnos cuenta que estábamos perdidos en el país de Alicia, somos espectadores y al mismo tiempo héroes de nuestras propias hazañas.

Algunas veces, nos ponemos en pausa. Algo así como parar el CD de música para escuchar el ruido de fondo y saber que te gusta más: el ruido o nosotros, nosotros o el ruido? Que difícil, pero volvemos a estrellarnos en nuestro mundo y caemos horas de horas en el juego de seguir hablando.

Cuantas cosas interesantes he aprendido con vos, que satisfacción darse cuenta que hay gentes como vos o como yo, es como encontrar el tomacorriente que calza perfectamente con tu enchufe cerebral. Las mismas aplicaciones, pensadas diferente, razonadas distinto, pero al fin y al cabo es la esencia la que cuenta y aunque no nos parezcamos ni un poco yo se que ya te había conocido, o tal vez reconocido, esto es solo la continuación de la tirada de la cuerda.

Podemos quedarnos sentados y darnos cuenta que no comimos, los demás apresurados nos vieron tan ocupados en nuestro mundo que no nos han interrumpido y cuando volvemos de la realidad las puertas se están casi cerrando, alguien acabo mis cigarrillos, se tomaron las cervezas y no nos hemos levantado para ir al baño ni una vez en toda la noche, por Dios: dejamos de ser personas por unas cuantas horas –que hermoso!-, creo que respiramos tan poco, estamos alimentados de la información que cada uno pueda meterle al otro en la cabeza, casi a la fuerza pero así es como nos gusta: tenemos poco tiempo, contra el reloj: apurate decí todo lo que podás y lo grabo casi en piedra!!!

Y no lo hacemos tan seguido, -no que va-, moriríamos de hambre seguramente. Imaginate quedaríamos mentalmente agotados, casi secos y la sangre no es lo que llena nuestros cuerpos.

Thanks Fla

martes, 3 de julio de 2007

Hablando de amores


Una libélula llegó a mi puerta un día y me contó una historia. Empezó a hablar sin más, como si yo tuviera tiempo, como si yo quisiera oirla. Yo estaba reunido, extrañamente con sus amigos, al menos parecían sus amigos, pues todos volaban sin parar, parloteaban y volaban sin control, tal como lo hacen las libélulas.

El caso es que la libélula empezó a contarme su historia y sin darme cuenta me hice parte de ella. Me sorprendí acariciando sus propios sueños y ahorcando sus angustias. Establecí una conexión interna suficientemente fuerte como para querer volar con sus alas de libélula, ver con sus ojos de libélula, pero sobre todo, sentir como sienten las libélulas.

Me contó sobre su padre, el señor libélulo, un fortachón macho muy moderno, de mente amplia y sin prejucios sociales, pero si con prejuicios de papá. Me contó sobre su mamá libélula tambien y esto, he de confesar, es materia para otro cuento distinto a este.

El señor libélulo, como te contaba, era un papá común, preocupado por el crecimiento ascelerado de su hija libélula. Trató siempre de restar importancia a las preguntas incontrolables de mi amiga libélula, ella preguntaba de todo. Quería saber como estaban hechas sus alas y como estaba hecha su cabeza; preguntaba también sobre sus gustos libélulos y sobre las responsabilidades de su especie, de como debían ser la relaciones entre todas las libélulas de su familia y de como sería además, las relaciones de su familia con el resto de la gran comunidad.

Mi amiga libélula quería respuestas y cuando no las encontraba cerca, iba a buscarlas donde fuera. Hasta que un día se encontró con un libélulo fortachón también, grande como su papá, pero con ideas y experiencias diferentes, pensamientos distintos y deseos diferentes.


Para mi amiga la libélula era como hablar con su papá, pero con una extraña sensación de atracción, sentía ganas siempre de estar con este nuevo personaje. Lo visitaba cada vez que podía, cada tanto aprendía nuevas cosas y nuevas ideas se cruzaban por su mente; se gestaban planes y pasiones alocadas, serias o no.

Un día le dijo a su papá libélulo:

-Voy a ver a mi nuevo amigo, papá.

-A quién?!. Preguntó su papá, tratando de disimular su asombro y ahogando entre sus dientes (por que has de saber que las libélulas también tienen dientes como los nuestros) un grito de deseperación al sentir que su pequeña libélula se estaba aproximando al abismo que hay entre la fantasía y la realidad.

Estaba seguro el señor Libélulo que el libélulo amigo de su hija, le enseñaría el camino a una ciudad distinta, aquella a la que van todos los libélulos una vez que tienen edad de separarse del mundo de fantasía y acercarse al mundo real. Pero don Libélulo no temía al hecho mismo, sino al tiempo. Para él era muy pronto saber a su hija cruzando por los pantanosos bosques que conducen a aquella ciudad, lo sabía porque él, como tantos otros había hecho la peligrosa travesía, así que imploró, rezó en silencio y juró marcando sus alas con espinas, golpeando su cabeza contra los árboles más fuertes de su ciudad, que si existía un Dios libélulo, éste debía escuchar sus ruegos y no permitir que su pequeña e inofensiva hija viviera esa angustia a una edad tan extremadamente corta!

Sabiendo don Libélulo que no podía negar a su hija la oportunidad de conocer sus propios deseos y responder a ellos por su propia decisión, decidió callar y seguir orando.


Y así fué, mi amiga libélula se fué a visitar a su nuevo amigo y escuchó, escuchó todo lo nuevo que tenía su amigo que contar, pero se permitió un tiempo para asimilar de a pocos toda esta nueva información que ahora tenía consigo. Todo era mágico, supremamente hermoso como para desear visitar esta nueva ciudad y acordó consigo misma que lo haría, pero su debido tiempo.

Un día, un grupito de libélulas invitó a mi amiga a pasear. Querían llevarla a donde las pequeñas libélulas van a asicalar sus alas y rozar sus cuerpos con otros de su tamaño. Ella, por supuesto que fué con el grupito de libélulas ahi, a donde...

Sorprendida quedó mi amiga, cuando le contaron que su nuevo amigo estaba totalmente furioso con ella por que se fué sin contarle ahí, donde van las libélulas pequeñas a asicalar sus alas y rozar sus cuerpos con otros de su tamaño... Más sorprendida quedó cuando su nuevo amigo dejó de visitarla y no le volvió a contar historias sobre esta nueva ciudad tan hermosa que a través de promesas le había querido enseñar.

Lloró y lloró la libélula, incrédula sobre el hecho contó asombrada a su papá, don Libélulo, lo que había pasado. Este, sin querer mostrar lo que por su cabeza de libélulo pasaba, se dijo a sí mismo:

-"Hay un Dios libélulo, hay un Dios libélulo y soy testigo de ello y ha escuchado mis ruegos y ha respondido a mi autoflajelación, al dolor de las espinas que he clavado en mis alas y me ha permitido tener a mi hija un tiempo más conmigo!!!"

Por supuesto que mi amiga libélula nunca pudo ver en el interior de su padre, quien calmada y pacientemete, abrazó con sus alas libélulas a su hija pequeña y suspiró y suspiró.

Sus amigos libélulos, aquellos con los que yo estaba reunido cuando esta libélula llegó a interrumpir, empezaron a girar y girar y gritar eufóricos por alguna razón.


Mi amiga y yo tratamos de conocer las razones de esta algarabía, pero no lo logramos. Fue entonces cuando decidimos seguir viajando con sus alas libélulas a otro nuevo cuento que ella tenía que mostrarme.

Vicky.....I love you!


Julio 3....35

Abriste lo ojos sin saber qué ocurriría, sin saber que vidas tocarías y sin saber que vida vivirías. Serían 35 hoy, los números no importan.

Feliz cumple Gas!